Cada vez me gusta más mi ciudad, mi entorno, mi tierra. Ella es mi auténtica patria. Ella y mi lenguaje, mi idioma. Esas son mis patrias. De lo cual se deduce, sin que haga falta mucha perspicacia que el problema catalán, para mí, no tiene la menor importancia.

A 15 kilómetros de la ciudad más hermosa de España, que es Ronda naturalmente, se encuentra el pueblo más bonito de este país. Evidentemente, no puede ser otro que Setenil, esa maravilla incrustada en la roca. Estamos rodeados de belleza irremediablemente.