UN SONETO ME MANDA HACER VIOLANTE

Así comienza el más que famoso Soneto con el que Lope de Vega, con maestrí­a insuperable, enseñaba la mejor manera de componer este legendario poema estrófico, compuesto por dos cuartes y dos tercetos.
He elegido este título por su valor simbólico, ya que hace referencia a la época en la que los sonetos se convirtieron en moneda corriente entre los letrados, aunque no por ello, vulgares ni ordinarios.
Lope de vega, autor de más de mil de ellos, es uno de los más insignes sonetistas de todos los tiempos. Pero el tema que trataré no se trasladará a épocas doradas de nuestra literatura y de nuestra historia. Muy al contrario, quiero con ellos retratar esta época marrullera, superficial, vana, tramposa, inconsistente, que nos ha tocado padecer.
Su protagonista permanente será la actualidad y la mirada será decepcionada, irreverente, desencantada y, por todo ello, crí­tica. Nos toman por tontos; tal vez lo somos. Al menos, yo quiero hablar. Los empecé en noviembre de 2014.

CATALUÑA 

La locura de un Mas acorralado
y la torpe inacción del Presidente
harán que crezca el voto independiente
cual setas en un bosque rociado.
Es fácil predecir que pronto o tarde,
Cataluña obtendrá la independencia,
será la consecuente consecuencia
de tanta dejación y tanto alarde.
Polí­tica es hablar, negociación,
discutir, batallar, acalorarse,
ceder, pedir, rogar, entusiasmarse,
poner todo a la luz de la razón,
callar, oí­r, reí­rse y enfadarse,
y excitar e incitar la solución.

SEÑOR PRESIDENTE

Sea el primero, señor Presidente,
este soneto dolido, amargado.
que aunque viaje en un metro educado,
no por ello sea menos contundente.
Yo no puedo seguirle la corriente,
ni olvidar lo que huele aquí a mi lado,
ni yo quiero quedarme así callado
ante tanta desvergüenza indecente.
Me duele tanto horror, tantas patrañas,
tanto abuso soez y tanta mierda,
esta triste sandez que no recuerda,
que tiene un cieno negro en las entrañas.
Y me impiden la derecha y la izquierda
que me sienta orgulloso de España.

LA DUQUESA DE ALBA

La duquesa se ha muerto, la nobleza
saca a la luz su facha inalterable,
su look ya demodé y desagradable,
su espíritu esmaltado de pereza.
El tono radical reaccionario
se mezcla con la savia popular
el fervor con el morbo secular,
el móvil con el santo escapulario.
Por su tono rebelde fue admirable
esta ilustre reliquia del pasado,
con su facha moderna y su ducado,
su hacienda y su riqueza interminable.
Cayetana, hasta el alba te ha llorado,
hembra densa, liviana e indomable.

LA CARA DE LA PANTOJA

A la cárcel con bata de cola,
su peineta y su piel de aceituna,
con su cara de mármol y luna,
se encamina la viuda española.
Rebozada en vulgar tonadilla,
ataviada con tul delincuente,
sin vergüenza le pide a la gente
que la salve de tal pesadilla.
Isabel, por favor, qué indecencia,
qué vulgar y ruin paradoja,
¿no percibes que ya es demasiado?
¿no te pica un pelín la conciencia
mendigarle dinero, Pantoja,
a los mismos que antes has robado?

ANA MATO

No merece esta dama ni un soneto,
como mucho un grotesco garabato,
¿qué más puede esperar Anita Mato,
ese desastre trágico y completo?
¿Trágico? Mas bien cómica, hilarante,
es su vana y patética presencia,
su cara de pitufa y su apariencia
de torpeza infinita y sonrojante.
Señora sin cerebro y sin sustancia,
pequeñita, aburrida, poca cosa,
sumisa y complaciente como esposa,
que no sabe las trampas de su esposo;
¡Qué bella y qué bendita es la ignorancia
para salir de un trance sospechoso!

CARMEN DE VALLECAS

El alma de Vallecas se acongoja,
la tristeza se asoma a los balcones,
la angustia no conoce las razones
de la hiena sedienta que despoja.
El alma ya no puede con el peso
de tanta iniquidad, tanto atentado,
tanto bribón siniestro y redomado,
tanto cabrón vestido de progreso.
Me cago en un sistema repugnante,
que permite que Carmen y otra gente
reciban en el centro de su frente
la baba de ese dios ruin, sangrante,
que preside con lógica indecente
y se lleva a los pobres por delante.

EL ARZOBISPO DE GRANADA

Postrado ante el altar, acongojado
tendido en actitud servil, sagrada,
el ilustre arzobispo de Granada
reclama por la grey ser perdonado.
Siniestro y deplorable purpurado,
que erige ante la atónita manada,
patética y pomposa payasada,
impropia de un sujeto consagrado.
Pastor que no protege a sus ovejas,
lobo que sacrifica a su rebaño,
profeta del disfraz y del engaño
de una iglesia caduca y carcomida
por miserias fanáticas y viejas
perversiones sangrantes que él olvida.

EL PEQUEÑO NICOLÁS

En esta España friki y bullanguera
el joven Nicolás campa a sus anchas,
una mancha entre muchas otras manchas,
un borrón que emborrona a España entera.
Lo mismo puedes verlo en la Zarzuela
que al lado de Soraya debatiendo,
con Aznar, en la mesa, presidiendo,
dibujando en el mar su propia estela.
Los coches oficiales son su casa,
los despachos, su espacio natural,
su verdad, la mentira nacional,
su imagen, paradigma de la guasa.
la España de charanga y pandereta
rendida a la razón de su bragueta.

MONAGO

Monago que parece monaguillo,
tan místico, formal y reflexivo,
que nadie lo tendría por impulsivo
amante que escaquea su bolsillo.
Las islas y también Olga María
son un veneno hermoso y suficiente
para sacar al casto presidente
de su extremeña y santa cofradía.
¡Ay, Monago, qué espléndido equipaje
debe albergar tu sátira bragueta,
un arma dura, rígida y secreta,
que evidencie tantísimo viaje;
un cipote que exige un homenaje,
un premio a su fantástica escopeta.

EL PAPA FRANCISCO

Argentino, sensato y evangélico,
humilde, jesuita y campechano,
pendiente más del daño del hermano,
que del coro divino y arcangélico.
Sediento de justicia, independiente,
reflexivo, cordial, comprometido,
preocupado, intranquilo y abatido
por un mundo que muere lentamente.
Francisco es savia nueva en árbol viejo,
pastor que salvaguarda su rebaño,
con su ejemplo, su ardor y su consejo;
renovador sincero de la Iglesia
para elevarla al cielo otro peldaño.
sin mentiras, sin trampas ni anestesia.

GALLARDÓN

Este galán gallardo Gallardón,
con pinta de Jaimito mequetrefe
se hizo más de derechas que su jefe
con tal de complacer a su ambición.
Alberto nunca pierde la ocasión
de ser el más osado, el más prudente,
el más astuto, el más inteligente,
el más que más llamando la atención.
Pero el jefe no quiere competencia,
y este Albertito, brillante y mujeriego,
era un chino en la bota del gallego,
una mosca pegada a su conciencia
y, a pesar de su próvida paciencia,
con carita de póker lo echó al fuego.

PODEMOS

No me gustan los credos ni los ismos,
todos llevan encima sus miserias,
sus locuras, sus morbos, sus histerias,
sus mazmorras, sus farsas, sus abismos.
Los que vienen serán como los otros,
sembrarán inconcretas ilusiones,
nuevos versos, estrofas y canciones,
en la tierra inocente de nosotros.
Pero no será inútil su llegada,
al menos, por un rato limpiaremos
la casa deslucida y saqueada
y luego ya vendrá lo que veremos;
volverá la esperanza defraudada,
pero, mientras, yo creo que Podemos.

PACO MARÍN I

Su mundo era la fuente, el Sol, la rosa,
el tomillo, la paz, la mejorana,
empaparse en el mar de la mañana,
regalar su alma noble y generosa.
Su norte, una penumbra misteriosa,
su meta, hacer la vida más humana,
su manjar, un madroño, una manzana
a la luz de una luna luminosa.
Los árboles, las flores y la gente,
los cielos, sus alumnos, sus pinturas,
conocieron sus libres aventuras
en busca del asombro permanente.
Su sangre ya alimenta la simiente
del bosque y sus amadas criaturas

PEDRO SÁNCHEZ

El nuevo Secretario General,
nuevas formas y el mismo contenido,
distinto pájaro en el mismo nido,
que nada cambie y todo siga igual.
Otra gloria del lumpen nacional,
otro traje de Armani pervertido,
guapetón, elegante y convencido
de su gancho y carisma natural.
Estos chicos cambiaron de chaqueta,
mandaron a la mierda el ideario,
quisieron ser lo mismo y lo contrario,
paloma mensajera y escopeta
y ahora se disfrazan de etiqueta,
de cura o de marqués si es necesario.

LA GURTEL

Esa red de secuaces del Estado,
supuestos y ladinos servidores,
es ejemplo, señoras y señores
del fango que nos tiene acorralados.
Dos cosas el político en su frente
lleva como un fatídico deber:
mantenerse impasible en el poder
y sacarle el provecho suficiente.
En Gürtel se resume la ralea
de esta gente siniestra y corrompida,
de esta tropa de fieras y alimañas,
que con tino fanático saquea,
desde su hiel linfática y podrida
los tesoros recónditos de España.

FELIPE VI

Por la gracia de Dios, Felipe VI,
por voluntad del padre, coronado,
una reliquia, un fósil del pasado,
un figurón en un libro de texto.
Sangre azul se supone por sus venas,
rito, dogma, palacio y tradición,
sinrazón que repugna a la razón,
verdades mentirosas y terrenas.
Un hombre señalado, diferente,
que sabe lo que a todos nos conviene,
un mago fabuloso e inocente,
que caga, que se viste y que se peina,
y que, a pesar de todo, entre otras tiene
la suerte de dormir con una reina.

¡MADRE MÍA!

Me levanto con temor cada mañana,
Y aunque mire con gozo al nuevo día,
pongo la radio y cesa la alegría
al escuchar la mierda cotidiana.
Robos, mordidas, sisas, corrupción,
basura por arriba y por abajo
y se me caen los palos del sombrajo
y llorando me escondo en un rincón.
Ya no queda más sitio en mi paciencia,
lo siento, se acabó, yo ya no sigo
legitimando a randas sin conciencia.
De esta gentuza negra y desgastada,
(juro tomarme en serio lo que digo),
no volveré a creerme nunca nada.

DEL BOSQUE

Un bigote delante de un buen hombre,
un experto señor de la pelota,
curtido en la victoria y la derrota,
noble por alma y noble por su nombre.
Un marqués campechano y bonachón,
pionero en sembrar buenas maneras,
educadas, corteses, caballeras,
en el mundo grosero del balón.
Que cunda con su ejemplo el buen ambiente
en los campos de fútbol españoles
que los derbis no sean una guerra,
que el juego enganche y no aparte a la gente.
Que solo suene el eco de los goles
en los grandes estadios de esta tierra.

ANA BOTÍN

Elegante, selecta, poderosa,
hembra de armas tomar, espabilada,
en la cresta del mundo y de la nada,
que conforma esta estirpe luminosa.
Ana Botín, augusta presidenta
del reino misterioso del dinero,
poderoso y cobarde caballero,
que se esconde si llega la tormenta.
Pertenece a ese gremio que nos manda
de verdad, sin decretos y sin leyes,
sin piedad, sin razón, sin miramiento;
bandidos silenciosos de esa banda,
que manda en los gobiernos y en los reyes,
por encima de todo mandamiento.

TSUNAMI

El tsunami que ataca y amenaza
no es fruto, no, de la casualidad,
ni es una ola de gris fatalidad
ni una pobre y modesta calabaza.
Es algo más profundo, más sincero,
algo que lleva tiempo germinando,
cociéndose en silencio, macerando
al calor fantasmal de unos cuatreros.
Políticos de pega, de opereta,
conseguidores, pillos y banqueros
bribones, insaciables y fulleros,
truhanes de corbata y de tarjeta.
Ellos solos han puesto como vemos
al país en las manos de Podemos.

MONTORO

Yo utilizo a Montoro cuando quiero
partirme la mandíbula batiente
con la risa del pobre resistente,
que teme por la flor de su trasero.
Si busco un pasatiempo verdadero
si pretendo nadar contracorriente
y si quiero alejarme del presente
uso a este divertido caballero.
La endeblez de su voz nasalizada,
el glamour de sus gafas porsiacaso,
su discurso de ayeres y de ocaso,
todo en él es hiriente bufonada.
Personaje de cómic y de nada
en su arcaica cabeza de payaso.

PACO MARÍN II

La Luna tiene un velo en la mirada
y se ha callado el canto de los grillos;
se evaporó el perfume del tomillo
y el alba abandonó la madrugada.
La sierra está llorando tu partida,
te añoran los caminos y sus gentes,
las piedras, los arroyos y las fuentes,
y el Sol en su periplo no te olvida.
De pronto se detuvo tu destino,
pero siguen llenando mi equipaje
la luz y el resplandor de tu mensaje
sincero del discreto campesino.
Volverás, disfrazado de paisaje
para alumbrar a todos el camino.

MI AMIGA LOLA

Mi amiga Lola cuida tres claveles
y una rosa que aún arde en su pecho,
malherido, atónito, maltrecho,
desierto de lisonjas y caireles
.Mi amiga Lola mima aquellas cosas
que su Pedro mimaba con esmero
y le cuenta a las flores y al florero
sus cuitas y sus penas silenciosas.
Pero Lola conoce que igualmente
ha de seguir andando su camino,
avanzar contra el vértigo inconsciente,
vencer al desaliento mortecino,
asirse a sus amigos y a su gente:
llorar mirando al frente es el destino.

LA REINA LETICIA

La obstinada e intrépida Leticia
descubrió que su mundo y que su espacio
eran más las ficciones de un palacio,
que la pobre verdad de una noticia.
Ambiciosilla Ortiz Rocasolano
resuelta a compartir aristocracia,
aupada por la gracia de su gracia
de origen familiar republicano.
Agarrada al Borbón como una lapa
transita por su propia dinastía,
soberana gentil y glamurosa,
reinona más famélica que guapa,
distante camuflada de ambrosía,
crisálida arrogante y orgullosa.

ESPERANZA AGUIRRE

Un soneto brutal para Esperanza
me pide mi furor escarnecido
y exige mi decencia y mi apellido,
un soneto que sirva de enseñanza.
Mas no puedo ni quiero comportarme
lo mismo que ella misma se comporta,
con esa desvergüenza manicorta;
prefiero frente a eso silenciarme.
Mas digo, aunque de forma contenida,
que el cinismo que luce es atrevido,
que unos le están tomando la medida
y otros le van a dar su merecido.
Ya no le queda mucho en la partida
a esta dama de hierro enmohecido.

EN EL NOMBRE DLE PUEBLO

Dejad ya de mentir, no somos niños,
que crecen entre cuentos y ficciones,
dejad ya de tocarnos los cojones,
guardaos, por favor, vuestros cariños.
Podéis guardar también vuestras promesas,
los trucos, artimañas y ficciones,
lanzadas cuando llegan elecciones
a estas pobres y lánguidas cabezas.
Meted vuestra mentira en la maleta
y dejad de ciscaros en la gente,
expatriaos con ella a otro planeta
podéis llevar también a los parientes
para que así sin caras ni caretas
podamos disfrutar nuestro presente.

SUSANA DÍAZ

Cubista como un cuadro picassiano
y más dura que el mármol de Carrara
tiene esta dama intrépida la cara,
a medias entre yegua y ser humano.
Trepadora mañosa e inclemente
es un hacha blindando a sus amigos,
lo que dijo ayer hoy le importa un higo,
más o menos lo mismo que la gente.
Entre cuentos y trampas prisionera,
poblada de más ínfulas que luces,
el poder y su gloria la seduce,
peligrosa y aleve compañera,
muy capaz de ensancharse en cuanto quiera,
más allá de los predios andaluces.

¿YO, PESIMISTA?

Yo soy, como Sabina, un pesimista,
dicen los que no saben de mi esencia,
pero yo les replico con paciencia,
que más bien lo que soy es realista.Y yo diría, incluso, que optimista,
pues sabiendo del fondo y la apariencia
del mundo, y de los hombres, su conciencia,
seguir soñando es toda una conquista.
Y yo sigo soñando esta aventura
con luces de bohemia enamorada,
a veces, disfrazado de cordura,
en la piel de una oveja descarriada
y otras tantas, vestido de locura,
abrazado a los pechos de la nada.

LA GRAN BATALLA

El mundo anda revuelto como el mar
mecido por los vientos otoñales,
naufragando en los fuertes temporales,
que originan el hombre y el azar.
Zozobrando en las olas se debate
como un titán maltrecho y malherido,
sin darse, bravamente, por vencido,
en el fiero y frenético combate.
A veces, orgulloso se levanta,
asido a las raíz de su conciencia,
otras veces, sencillamente aguanta
usando su antológica paciencia
y envuelto en la batalla se agiganta,
jugándose su honor y su existencia.

COSPEDAL

Esta dama de aspecto comedido,
guapa, airosa, compuesta y elegante,
es capaz de llevarse por delante
al listo más sagaz de su partido.Su cara de granito le permite
pagarle al tesorero en diferido,
cobrar en “be”, aupar a su marido,
y aquello que su jeta necesite.
Ella atiende a la prensa así, tal cual,
se sabe capitana y seductora,
de la tropa del “pepe nacional”,
el pepe de esta gran conservadora,
intrigante y febril amañadora,
a su servicio siempre: Cospedal.

SUSANANITA LA IMPACIENTE

¿Qué le pasa a Susana la impaciente?
¿Qué tiene que le turba la mirada?
¿A qué viene esa cara cabreada
y ese estado de rabia permanente?Es que nadie le sigue la corriente
y así no puede ser la presidenta
ambiciosa, magnífica y atenta
que a sus pobres paisanos represente.
¡Ay, Susanita, estólida sin luces!
¡Adelantar así las elecciones
por el bien de tus caros andaluces
sin tomar las debidas precauciones
y hallarte que te vas a dar de bruces
con tus mismas y malas intenciones!
WERT
Cargado de proyectos e ilusión,
a París José Ignacio con su chica,
se larga, pero a España le salpica
su detestable ley de educación.
Profeta de la triste sinrazón,
con celo de fanático se aplica
a lomos de principios de formica
a defender sin fe religión.
Maltrechas por su bota naufragaron
las pérfidas sin par Humanidades:
adiós griego, latín, filosofía.
Dentro, las anestesias se quedaron,
fuera, las luminosas claridades;
querer que piense el pueblo, ¡qué manía!

RAJOY

Este ser aburrido e indolente,
de boca floja y plácida apariencia,
es un líder que brilla por su ausencia,
un anodino y tibio Presidente.
Apático, falaz, indiferente
“cogesobres” podrido, sin conciencia,
que pide a los demás lo que su esencia
es incapaz de dar, aunque lo intente.
Me pesa tu desidia, Mariano,
me alarma que mi vida y mi dinero,
mi frente, mi entereza y mi trasero
dependan de la argucia de tu mano.
Un pobre y denigrante mamporrero
de los dueños del mundo soberano.

EL VOTO

Por él mienten, se arrastran, especulan,
se venden, se corrompen, te ilusionan,
se arañan, se acarician, se perdonan,
por él roban, defecan y eyaculan.
Por él corren, te compran, te prometen
por él lloran, se ríen, se emocionan,
se abrazan, te persiguen, te abandonan,
se entregan con pasión, se comprometen.
Por él suben y bajan, van y vienen,
por él pierden el culo y hasta el norte
por él en el abismo se mantienen
sin nada que les frene o les importe.
Y sin ningún pudor, cuando lo tienen,
lo olvidan y le dan el pasaporte.

NADA CAMBIA

Mi amigo no le teme a las tormentas
políticas, románticas, sociales ,
ni le importa el olor de los rosales
ni el fragor de las masas turbulentas.
Él prefiere la magia de las cuentas
y el brillo de los himnos liberales,
y atempera sus limpios ideales
arrimándose al sol que más calienta.
Conoce con detalle las letrinas
del corazón del mundo desbocado,
las dudas, los temores, las doctrinas
le tienen plenamente sin cuidado,
pues sabe que vendrán las golondrinas
otra vez a los nidos del pasado.