Alucinada

No sé qué me pasa hoy
pero me encuentro fatal;
no consigo concentrarme
y todo me sale mal.
Tal vez una mala racha
esté rozando mi piel
o quizás sea simplemente
que ayer me crucé con él.
No lo puedo olvidar,
me hace falta su mirada;
quiero seguir así:
alucinada.
Cuando paseo por las calles,
lo veo en todos los hombres
y en los libros, cuando estudio,
no veo más que su nombre.
Y su voz es la que escucho
cuando conecto la radio
y cuando enciendo la tele
presenta el telediario.
No lo puedo olvidar,
me hace falta su mirada;
quiero seguir así:
alucinada.

Vente conmigo

Somos una aventura
que llega tarde (bis).
Somos como una espiga
que no se abre (bis).
Somos una ilusión
que se muere cuando nace.
Somos como el refugio
donde no hay nadie (bis).
Somos un fuego errante
que anima el aire (bis).
Somos como la luz
que se escapa por la tarde.
Vente conmigo
a recorrer el camino,
juntos, podemos ir,
sólos, nunca llegaremos.
Somos una esperanza
que va volando (bis),
que cualquier roce suave
la va matando (bis);
el rastro de la fe
que va quedando.
Somos una promesa
que queda lejos (bis).
Somos un beso amargo
que se hace viejo (bis);
la imagen de una flor:
somos poco más que eso.
Vente conmigo
a recorrer el camino,
juntos, podemos ir,
solos, nunca llegaremos.

Viva el festival

Me gustan las canciones que se cantan aquí,
me gusta respirar esta amistad.
Me gustan este ambiente y esta fiesta feliz
y todo lo que encierra el festival.
A todos nos haría ilusión el ganar
pero hay cosas más bellas todavía:
para mí lo importante fue participar
y haber ganado amigos cada día.
Viva el festival,
viva el festival
porque cantar es
fenomenal.
Viva el festival,
viva el festival
porque con él llega
la amistad.
En todos los ensayos he podido aprender
que no era tan difícil el cantar;
que para hacer bien tan sólo hay que poner
amor , mucha alegría y voluntad.
A todos nos haría ilusión el ganar
pero hay cosas más bellas todavía:
para mí lo importante fue participar
y haber ganado amigos cada día.
Viva el festival,
viva el festival
porque cantar es
fenomenal.
Viva el festival,
viva el festival
porque con él llega
la amistad.

Ella es así

Tiene la vida en sus manos
y una luz en la mirada;
todas sus preocupaciones
las esconde en la almohada;
a ratos alguna sombra
aparece por su cara
de quince años que escapan
a quien algo en ellos busca,
de quien quiere descubrir
el misterio que allí oculta.
No quiere hablar de cuestiones
que perjudiquen su embrujo,
por eso sólo se ocupa
de vestidos y otros lujos.
Ella es así
y así será
porque es hija de la moda
y de los whiskys con soda
y de «lo nuestro es pasar»;
pero, tal vez,
un día vendrá
algún solterón muy serio
que le robará el misterio
y su mundo de cristal.
Para conservar su encanto
y oler a Naturaleza,
vende su piel a perfumes,
maquillajes y recetas:
todo lo tiene a su alcance
para jugar a ser bella;
para seguir caminando
con sus sueños, con su gente,
para alegrarles las fiestas
fingiendo lo que no siente.
No le importan los negocios
ni malgastar ilusiones,
vive feliz en su mundo
recogiendo admiraciones.
Ella es así…

Basta ya

A veces me encuentro cansada,
sin saber qué hacer
con este mundo que nos ha tocado
padecer,
donde gana el que más tiene
y siempre a los mismos
les toca perder.
Aunque seas un malvado,
si te sabes vender,
con cartera y con corbata
todo te irá bien;
lo que vale no es que seas honrado
sino que los otros
lo puedan creer.
Ya es hora de que digamos
de una vez que ¡basta ya!
A este juego que me ofrecen
yo no juego más.
Hay que volverles la espalda
a los dueños del poder,
a esos que piensan que todo,
todo es comprar y vender.
Los otros son los enemigos
que hay que derrotar,
rivales que si no te aplastan
debes aplastar
si quieres ser algo en la vida,
conseguir el triunfo
en esta sociedad.
Si ahora no lo tienes claro
ya lo aprenderás;
aunque te cruces de brazos
te lo enseñarán:
nuestra meta en esta vida
no está en ser feliz
sino en ser eficaz.
Ya es hora de que digamos…

Como cada día

Cuando el reloj me despierta
quiero dormir, quiero dormir;
en el mejor de los sueños
quiero seguir, quiero seguir.
Al ver que no me levanto
mi padre se pone serio,
de un salto me preparo,
me marcho hacia el colegio.
Encuentro a mis amigos,
como cada mañana,
aún están dormidos,
se les nota en la cara.
Y cuando la sirena
suena que te suena
nos despierta de una vez,
empieza la jornada,
vamos a ver…
si guardamos silecio,
si estamos atentos
porque esto no puede ser:
con tanto ruido
¿quién va a aprender?
Entro en la clase contento,
quiero aprender, quiero aprender;
pero con tantos problemas
no sé qué hacer, no sé qué hacer.
Con las Sociales me aburro,
con el Dibujo me animo,
la Lengua me marea,
con el Inglés me lío.
Con tanta asignatura,
 tantas evaluaciones,
estamos deseando
que den las vacaciones.
Y cuando la sirena…

Así es la vida

Uno camina sin sabor dónde
podrá encontrar de una vez el rumbo;
sin darnos cuenta vamos cayendo,
nos levantamos tumbo tras tumbo.
Vamos dejando atrás una historia
que va borrando nuestro destino;
aunque miremos siempre adelante
nunca podremos ver el camino.
Y las batallas te van marcando,
cada experiencia te hace distinto.
¿De qué nos sirve forzar el paso
si al fin y al cabo siempre es lo mismo?
Algunas veces será la suerte
la que nos marque alguna victoria
pero otras veces, pese al esfuerzo,
nos encontramos con la derrota.
Así es la vida, ¡hay que joderse!
y encima así tendrás que aceptarla
que aunque esta máquina no funcione
nunca nos dejan manipularla.
Y las batallas te van marcando,
cada experiencia te hace distinto.
¿De qué nos sirve forzar el paso
si al fin y al cabo siempre es lo mismo?

Malos tiempos

Fuimos cogidos al vuelo,
torpes y fáciles presas,
nos enseñaron los cuentos
que le enseñan al que empieza,
para cortarnos las alas,
para enjaularnos mejor;
que hay que aprender desde niño
a ser persona mayor.
Apagaron nuestras mentes,
nos dijeron que pensar
es una cosa indecente,
es un pecado mortal;
que hay que aprender la obediencia
al dogma, a la autoridad.
Crecimos con la consigna
de amar la mediocridad.
A quince años de aquellos años,
¡quién pudiera regresar
y eternizar los momentos
que saliéndonos del tiesto
respiramos libertad!
Y poder reconvertir
en Quijote a Sancho Panza,
pasar de tanto convento,
del Glorioso Movimiento
y de «hacer lo que Dios manda».
Que las mujeres son malas,
objetos de tentación;
para huir de su influencia
no hay nada que sea mejor
que la práctica del fútbol
y el descanso en oración.
Que hay que vivir muy atentos
por si llega la ocasión.
Aunque enemigas del alma
las mirábamos contentos,
que una cosa es la virtud
y otra lo que pide el cuerpo.
Pero los pocos romances
que hirieron nuestra pasión,
los vivimos en silencio,
a solas y en un rincón.
A quince años…
Pero no fuimos felices
con la virtud aprendida:
a fuerza de tabletazos
no se transmite la vida.
Tuvimos que fabricarnos
nuestra propia identidad,
sobrevolando los traumas
que nos hicieron cargar.
Luchamos por nuestra causa,
orinando en los portales,
apedreando farolas
y pateando las calles;
que era la mejor manera
de hacer la revolución,
que por entonces no había
otra manera mejor.
A quince años…

La magia del rock

El viento apaga los ecos,
todos se dicen adiós,
las notas quedan sonando
de la última canción.
Todos se marchan a casa,
alégrese el corazón,
envuélvase en sus sonrisas,
entre en el juego del rock.
Y véngase a soñar
y olvide su dolor,
disfrute con la magia
alegre del rock.
Y véngase a jugar con nosotros
y móntese en el tren del amor,
recoja y pinte todas sus cosas de color.
Vamos a pagar el llanto,
vamos a sembrar pasión,
vamos a dar alegría
envuelta en cada canción.
Pero le necesitamos,
véngase y ayúdenos,
no nos deje cantar solos,
necesitamos su voz.
Y véngase a soñar
y olvide su dolor,
disfrute con la magia
alegre del rock.
Y véngase a jugar con nosotros
y móntese en el tren del amor,
recoja y pinte todas sus cosas de color.

Coqueteando

Son fáciles de encontrar,
se pasean por tu acera,
se te acercan y te miran,
las quieres aunque no quieras.
Son frescas y cariñosas,
te tientan y, sin embargo,
se alejan sin recordarte,
dejando un sabor amargo.
Coqueteando,
revolotean alegres
y van dejando
pasar todas las cosas,
siguen buscando.
Les va la marcha,
rabiosamente exprimen
cada segundo;
le sacan brillo al tiempo:
ese es su mundo.
Nada les importa nada,
cuando no se ríen, juegan;
aunque no se lo propongan,
ellas siempre te la pegan.
El cigarro en una mano
y la otra siempre a punto,
con el gesto preparado
para buscar el asunto.
Coqueteando,
revolotean alegres
y van dejando
pasar todas las cosas,
siguen buscando.
Les va la marcha,
rabiosamente exprimen
cada segundo;
le sacan brillo al tiempo:
ese es su mundo.

Las calles

Un día más que se esconde,
la tarde, lenta, se va despacio;
el sol se marcha a otras tierras,
la ocupación se torna en descanso.
Y con la noche vuelve a empezar
la cara alegre de la ciudad.
Y cada uno a su sitio:
unos a casa, otros al bar;
las discotecas se llenan,
otros pasean sin más.
Unos ocultan su pena
tras una máscara de cinismo
y otros muestran su alegría,
lo que viene a ser lo mismo.
Y nuestras calles los ven pasar
y se comentan sordas y mudas:
son los fantasmas de la ciudad
que van buscando otra vez la luna.
Y otra noche que se rinde,
la aurora, lenta, se va acercando;
el sol se vuelve sirena
y el ocio deja el sitio al trabajo.
El ciclo vuelve a recomenzar:
es la otra cara de la ciudad.
Y cada uno a sus cosas:
unos despacho, otros cemento;
aquel pretende ascender,
éste, conservar su puesto
Unos que viven tirando,
otros que tiran viviendo
y otros muchos esperando
que vengan mejores tiempos.
Y nuestras calles los ven pasar
y se comentan, sordas y mudas:
son los fantasmas de la ciudad
que siguen sin encontrar la luna.

Nostalgia

Siento en mi corazón
nostalgia por tu partir;
veo que con mi amor
mis sueños van tras de ti.
Fuiste mi sombra,
mi atardecer;
fuiste la infancia que sin querer
pasó de niña
a ser mujer.
Yo, siempre te quise,
siempre te amé,
toda mi vida
para ti fue.
Siento en mi corazón
nostalgia por tu partir;
veo que con mi amor
mis sueños van tras de ti.
Yo nunca supe
acercarme a ti;
tu indiferencia
me hacía sufrir
y mi amargura
creció sin fin.
Yo, siempre te quise,
siempre te amé,
toda mi vida
para ti fue.
Siento en mi corazón
nostalgia por tu partir;
veo que con mi amor
mis sueños van tras de ti.

Entre nosotras

Ya debe ser la hora,
pronto llegarán por mí;
me encuentro en casa sola,
tengo ganas de salir.
Oigo la voz de mi madre,
no hace más que repetir:
«niña, no vengas muy tarde,
no andes sola por ahí».
Saldremos a la calle,
pensaremos que tal vez
es el mejor momento
para poder otra vez:
pasear por nuestro mundo,
caminar sin rumbo
hasta que suenen las diez
y guardar ese secreto
que parece inquieto,
que nadie debe saber.
Hoy como cada tarde
nos vendrán a perseguir
esos pesados de siempre
que no nos dejam vivir;
y nosostras seguiremos
sin pensar más que en aquel
que nunca nos dijo nada
pero nos miró una vez.
Qué pronto pasa el tiempo,
nos tenemos que marchar
y a esos que nos persiguen
los tendremos que olvidar;
y vover de nuevo a casa,
preguntar «¿qué pasa?»;
«¿Quieres algo de comer?»
Y encerrarnos en silencio
con nuestros recuerdos
que mañana hay que volver.

Eso solo te pasa a ti

A veces llegas tarde por las noches,
cansado de amasar tantas conquistas:
una tras otra y otra van quedando atrás,
se nota que eres todo un gran artista.
Te cuesta poco esfuerzo conseguirlas,
Te basta solamente con mirarlas,
Por mucho que lo intentes eres un Don Juan
Que llora cuando tiene que olvidarlas.
Y eso sólo te pasa a ti
porque eres un sentimental
y eso es lo mismo que la juventud:
sólo se cura con la edad.
Aprendiz de conquistador,
nunca aprenderás
que para conquistar
no hace falta la pasión.
No quiero que sufras más,
Deja de comerte el coco
que el amor hay que cogerlo
y soltarlo poco a poco.
Presumes de vivir como una estrella
Mas tiene pocas pelas que gastarte,
Te miman, te aprovechas, todo te lo dan
Y encima no haces más que enamorarte.
Mas noto que desde hace algunos días
estás pensando en serio en retirarte:
las huellas van quedando pero ellas se van
y tú no llegas nunca a acostumbrarte.
Y eso sólo te pasa a ti…

Qué más da

La brisa fresca que deja al pasar
me lleva triste y solitario a ver
que nada queda, que todo se va,
sólo recuerdos tibios del ayer.
Como una sombra queda y nada más
que una penumbra fluye y permanece
envuelta en mil pedazos de verdad.
Llega el momento y todo debe ser
como lo quieran ellos, ¡qué más da!
si somos fuego que deja de arder,
presas que huyen de la soledad.
Se va despacio cada atardecer
y en el silencio todo se adormece,
todo se oculta como sin querer.
Toda una vida dura la ilusión,
sólo un instante la felicidad:
el tiempo arrastra toda la emoción
y la esperanza va quedando atrás.
Y cada casa puede ser tu hogar
y es la nostalgia la que recompone
los mil pedazos rotos de verdad.
Siento que el miedo se aleja
que el recuerdo no es igual,
que estoy poniendo una queja
en tus labios de metal.

Nunca te olvidaré

Aunque me roben el alma
yo nunca te olvidaré;
en mi mente, en mi corazón
siempre te tendré.
Porque tú eres mi juventud,
porque el verte me da la luz
para seguir cada mañana
pensando en ti.
Cuando yo esté lejos
y cuando me añores,
estarán contigo
todas mis canciones.
Y en cada palabra
sentirás mi aliento:Nunca te olvidare
yo seré tu barca,
tú serás mi viento.
Quiero posarme en tu sombra
para descansar;
quiero seguirte en tus sueños
y en tu caminar.
Y en tu aire quiero volar
para no poder escapar
de tu sabor y no perder nunca
tu calor.
Cuando yo esté lejos
y cuando me añores,
estarán contigo
todas mis canciones.
Y en cada palabra
sentirás mi aliento:
yo seré tu barca,
tú serás mi viento.

En cuanto llegas tú

Suspiros que esconde la noche
ahogando el dolor en silencio,
las brujas retozan alegres
cruzando el espacio y el tiempo.
La bruma bosteza su pena,
el mundo se llena de cuentos,
la furia del mar que se eleva
dejando dormidos los sueños.
Y entonces llegas tú
regando el misterio
de otra primavera,
atizando el fuego
que hay dentro de mí,
como hace el otoño
con la sementera.
Y entonces llegas tú,
las brujas se pierden
con tu presencia,
se van las cadenas,
se apaga el dolor,
se marcha el olvido,
se van las ausencias
en cuanto llegas tú.