Si la intención basta, por mi parte puedo decir que este será el último musical que dedique a Ronda. Y puedo decir más, yo pensé que con «Ronda, verdad imposible», quedaba cerrado el tema de esta ciudad en el teatro. Pero, quedaron tantos cabos sueltos; tantas cosas se quedaron en el tintero, que no había más remedio que volver. Ahora, creo que la cosa quedará completa y cerrada, aunque, por supuesto, siempre habrá quien piense que falta tal o cual personaje, tal o cual historia. Pero lo sustancial está y creo que no hay que insistir más. Con lo que hay mi gente puede hacerse una idea apropiada de Ronda, de su gente, siguiendo la vocación que me anima siempre de educar divirtiendo o divertir educando.

TEATRO

Dos mitos rondeños, que aún no voy a revelar, serán el hilo conductor que hilvane las diferentes escenas de la obra, en las que se mezclarán, espero que en las dosis correctas, la música y la acción.

Mano a mano, dos maestros de la guitarra flamenca y delcante. Dos bohemios, dos  grandes personajes irrepetibles. Dos amigos dispuestos a abrirnos su corazón.

Paso Largos, un bandolero típico de la Serrani, su trágica vida y su muerte a manos d ela Guardia Civil. Una escena que nos lleva a aquel mundo de pasiones desatadas.

Federico Serratos y Jesús Vázquez, don Federico y don Jesús, como los conocía la gente. Dos humanistas al servicio de Ronda, que siempre antepusieron  la vocación al dinero. Y entre ellos, una sorpresa.

Crostóbal Palmero, Tobalo de Ronda, en una reunión entrañable con Fernanda y Bernarda que, aunque no son rondeñas, le prestan su nombre a nuestra Peña Flamenca.

Orson Welles, un cineasta imprescindible y Rilke, un poeta fascinante. Dos monólogos sabrosos en los que hablan de su vida y de su relación con Ronda..

El fundador de la tauromaquia, el que da nombre a nuestra feria mayor del mes de septiembre. Muy jugoso todo lo que tiene que decirnos en su monólogo

Un hombre bueno, en el buen sentido de la palabra bueno, como decía Machado. Diáfano, entregado a los demás, decente, honesto. Un ejemplo para todos, que no debiéramos desaprovechar.

Don Antonio Gaboa y Vicente Becerra, dos personajes entrañables de la Ronda del siglo pasado. Mucha bonhomía en los dos y un diálogo jugoso sobre aquellos tiempos.

Giner de los Ríos y Fernando de los Ríos son dos glorias de Ronda, dos referentes en los que mirarnos y mirar nuestra historia con orgullo. Y,entre ellos, una sorpresa.

Marcos Morilla y Lucas,  creadores de dos comercios que arrasaron en Ronda durante décadas. Sus obras terminaron siendo más conocidas que ellos.